Las ventas de Comercio Justo en España alcanzan 146 millones de euros
Los productos de Comercio Justo en nuestro país durante 2022 obtuvieron una facturación de 146 millones de euros, lo que supone un incremento leve (1,3 %) respecto al año anterior. Este es el principal dato del informe “El Comercio Justo en España 2022” elaborado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo, con financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo. Además, la publicación incluye los resultados de una encuesta sobre las motivaciones de la ciudadanía española ante los impactos ambientales y sociales de sus compras.
“En un contexto de crisis económica y aumento de la inflación, mantener el volumen de ventas e incluso incrementarlo levemente, es una muestra de la fidelidad que genera el Comercio Justo tanto entre la ciudadanía como entre las empresas”, ha explicado Alberto Abad, presidente de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo.
Con esta cifra global, el consumo medio por habitante en este tipo de productos durante 2022 en nuestro país fue de 3,08 euros. Se trata de una cantidad similar a la del 2021 y que se mantiene alejada de las cifras registradas en otros países europeos.
Canales de venta
Cerca del 80 % de las ventas de Comercio Justo se produjo en supermercados y grandes superficies. El segundo espacio de consumo de estos productos es el sector de hostelería, restauración y catering con una cuota de mercado del 13,7 %. En tercer lugar, la ciudadanía compra estos artículosen establecimientos minoristas, entre los que destacan las tiendas especializadas de Comercio Justo, cuya facturación ha sido en 2022 de 4,58 millones de euros, lo que supone un descenso ligero (de unos 127.000 euros) respecto al año anterior. El consumo en otros establecimientos minoristas como herbolarios o tiendas de productos ecológicos, ha sufrido un mayor descenso en este último ejercicio.
Ventas por productos
Por productos, cerca del 96 % de las ventas de Comercio Justo son de alimentación. Y dentro de este bloque, el cacao y los dulces siguen siendo los productos estrella, seguidos del café. Estos 3 productos generan algo más del 90% de la facturación. En la categoría de artículos que no son de alimentación destacan la ropa y el textil que, en el último año, han aumentado sus ventas en 1,3 millones de euros. “La demanda y venta de ropa y textiles de Comercio Justo están creciendo muy rápidamente”, ha asegurado A. Abad.
El mercado de Comercio Justo de nuestro país se abastece de la producción de 162 cooperativas y organizaciones de 50 países de América Latina, África y Asia. Los países con los que hay un mayor volumen comercial en la red son Perú, India, Uganda y Ecuador.
El café es el producto con una procedencia más amplia. África es la principal región productora de café que abastece nuestro mercado. Por su parte, el cacao procede de 15 países, principalmente de América Latina (República Dominicana, Bolivia, Perú y Ecuador), y de Costa de Marfil.
La ropa, artículos textiles y complementos proceden en su gran mayoría de Asia y, en especial, de India, Bangladés y Turquía.
El informe “El Comercio Justo en España 2022” está disponible en la web www.comerciojusto.org
Auge de la moda sostenible
El auge de la moda sostenible es ya una realidad. Cada vez proliferan más las empresas de moda sostenible, que son conscientes de la importancia de cuidar el medio ambiente. Tienen en cuenta no solo los tejidos y la producción de la ropa, sino también las condiciones de los trabajadores que la realizan. Esto se une a que existe una mayor preocupación de la sociedad por vestir de manera responsable y respetuosa con el medio ambiente.
La moda sostenible une cuidado medioambiental y respeto de los derechos humanos de los trabajadores textiles. Pero también protege la salud de las personas, al elaborarse con materiales naturales libres de componentes tóxicos.
Qué es la moda sostenible
Según Oxfam Intermón, implica la “conservación y buen uso de los recursos naturales necesarios para la fabricación y el diseño de las prendas”. Asimismo, emplea materiales que facilitan el reciclado y minimiza los “productos e insumos auxiliares en la producción”. Por supuesto, previene la contaminación en los lugares donde están las fábricas e impulsa su desarrollo social. Además, se caracteriza por el “respeto de los derechos laborales del personal de las empresas”.
La moda sostenible fomenta la producción y la artesanía local frente al abaratamiento por deslocalización, tal como afirma la Asociación de Moda Sostenible de España (AMSE).
La AMSE define qué es la moda sostenible: “toda prenda, calzado o complemento que respeta y cuida el medio ambiente y la salud humana”. Pero también debe garantizar los derechos y dignidad de los trabajadores implicados en la cadena de principio a fin. Emplea materiales orgánicos y reciclados. Trabaja por el consumo responsable y la economía circular.
Una industria textil más responsable
La industria de la moda es cada vez más responsable a nivel social y ambiental, como lo demuestra la formación de asociaciones y unión transversal en proyectos de investigación. Como ejemplo, en 2013, un grupo de diseñadores de moda, proveedores, talleres, distribuidores, entre otros ciudadanos, crearon la asociación sin ánimo de lucro Moda Sostenible Barcelona. El objetivo era sensibilizar a la sociedad de las ventajas de la moda sostenible, así como potenciar y estimular su creación, producción, venta y uso.
Un ejemplo de empresa comprometida es Uttopy. Desarrollan colecciones de moda sostenible que impulsan el micro activismo cotidiano. Producen con algodón 100 % orgánico cultivado en la India, reduciendo en un 90 % el uso de agua. Confeccionan en fábricas de la zona, contribuyendo al desarrollo local, y estampan artesanalmente con tintas ecológicas en su taller de Barcelona. No usan químicos ni tóxicos en todo el proceso, ni hacen ensayos con animales.

Pensando en uniformes y ropa de trabajo, hay empresas que ponen la sostenibilidad como premisa fundamental. Desde Circoolar ofrecen ropa laboral ética y sostenible, diseñada, fabricado y confeccionado bajo los principios de la economía circular y de impacto social.
Más proyectos de investigación
En cuanto a la investigación, hay muchos proyectos llevados a cabo por centros tecnológicos. Por ejemplo, una de las áreas estratégicas de la I+D de AITEX, la Asociación de Investigación de la Industria Textil, es la economía circular y la sostenibilidad. Algunas de las líneas de trabajo son: ecodiseño, reciclado químico del poliéster y algodón, revalorización de residuos pre y post-consumo, el estudio de la reducción del impacto de los microplásticos de origen textil… El principal objetivo es desarrollar nuevos procesos y tecnologías que reduzcan el consumo de recursos, ya sean materiales, energía, agua o químicos, disminuyendo de forma significativa el impacto medioambiental.
También las marcas investigan. Hemper es una marca independiente definida como regenerativa, “porque exponemos una solución a los problemas del mundo actual con un compromiso de cambio a largo plazo”. Lo hacen a través de la investigación y reformulación de materiales y procesos textiles artesanales ancestrales.

Otro ejemplo es Canussa, una marca de accesorios de eco-diseño “made in Spain”, conocida por sus bolsos sostenibles, que cuenta con el Canussa Lab, donde investigan nuevas técnicas y procesos de circularidad, ofreciendo servicios de eco-diseño a otras empresas.
Compra consciente
El slow fashion, el sistema de producción de moda responsable, consciente y respetuoso con el planeta, es ya un presente para la industria textil. Ayuda en Acción organizó un webinar bajo el título “Cómo comprar conscientemente y no morir en el intento”, al que asistió La Guía Sostenible. Para concienciar y poner en valor este tema, el webinar contó con la colaboración de Sonia Flotats, creadora y editora de So Good So Cute Magazine; Percentil España, alternativa a la moda segunda mano; y la marca de calzado sostenible Kumi.
So Good So Cute nace el año 2013 como un proyecto personal de Sònia Flotats, periodista especializada en moda y tendencias sostenibles. El objetivo era “demostrar que la moda sostenible, además de ser respetuosa con el medio ambiente y las personas, debía de serlo con la estética. Ahora, el desafío es “desvincular la sostenibilidad de conceptos como la renuncia, la culpabilidad o el sufrimiento”. Desde 2020, So Good So Cute es un magazine digital.
Percentil es una tienda de compraventa de ropa de segunda mano. Se encargan de todo el proceso: recogida, fotos y venta. Dan una segunda vida a la ropa y venden prendas casi nuevas, ya que seleccionan y garantizan que la ropa esté en perfecto estado.
Por su parte, Kumi utiliza materiales veganos, sostenibles y reciclados con el objetivo de una moda sostenible. También destaca por su amor a los animales y el apoyo a la economía local: reduciendo el impacto del CO2 y creando vínculos con empresas nacionales.
Fue un evento muy interesante, en el que se definió qué es la moda sostenible y se comentó la dificultad de comprar este tipo de ropa, ya que no es fácil saber a simple vista si una prenda es sostenible o no. No es suficiente con mirar la etiqueta y comprobar los materiales, también hay que saber la trazabilidad del producto, es decir, si se ha fabricado de forma ética. También se comentó que, a pesar de la creciente concienciación de los consumidores, aún queda mucho camino por recorrer. Por ejemplo, se da la paradoja de que hay jóvenes muy mentalizados pero la mayoría se deja llevar por las redes sociales, tik toks que fomentan ropa de “usar y tirar”, fabricadas en ocasiones a miles de kilómetros de distancia en condiciones laborales inhumanas o de forma poco o nada sostenible.
Sin embargo, no hay que olvidar que también hay influencers que fomentan el uso de ropa sostenible y de segunda mano.

Una segunda vida para la ropa
En este sentido, se puso de manifiesto la creciente aceptación de la ropa de segunda mano. Hasta hace poco, era denostada pero ahora existen plataformas y tiendas de moda sostenible que la han revalorizado.
Se estima que este mercado crecerá tres veces más rápido que el sector de moda convencional a nivel mundial, alcanzando la impresionante cifra de 350 billones de dólares para el año 2027.
La situación actual de la segunda mano en España se ve reforzada por un cambio en la legislación, específicamente la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular. Las empresas textiles deberán ejercer un mayor control sobre la producción y ofrecer opciones circulares para sus excedentes, como la venta de segunda mano, el reciclaje, la reparación y la donación.
En este sentido, destacan las plataformas de venta de prendas de segunda mano como Micolet, con más de 2,5 millones de usuarios. Con su innovador modelo RaaS (Resale as a Service), ofrecen una alternativa directa para la reutilización del stock, permitiendo a las marcas vender sus productos de segunda mano en su tienda online a los clientes.
El Informe de Moda Circular 2022, elaborado por Micolet, ofrece un análisis sobre la evolución de los hábitos de consumo en la industria de la moda. Revela cambios generacionales significativos y destaca la creciente importancia del resale como una solución viable para los consumidores. Los datos del informe son el resultado de un estudio de mercado realizado en colaboración con WeAreTesters, especializada en investigar los hábitos y actitudes de los consumidores en relación con la moda.
Las empresas aquí citadas son algunos ejemplos de moda sostenible. Pero hay muchos más. Puedes consultarlos en nuestra web, donde encontrarás fabricantes y proveedores sostenibles. Y es cierto que cada vez somos más conscientes de qué compramos y por qué, aunque queda mucho por hacer.

Más de 50 localidades de toda España se unirán al Día Mundial del Comercio Justo
Bajo el lema “Le sienta bien a todo al mundo” más de 50 localidades de toda España se unirán al Día Mundial del Comercio Justo (sábado 13 de mayo). Invitarán a la ciudadanía a probar sus productos en las más 60 tiendas de Comercio Justo y en actos de calle. Con esta jornada, las organizaciones de Comercio Justo quieren llamar la atención ante la condiciones abusivas de trabajo, la explotación infantil o la destrucción de bosques detrás de productos cotidianos. Por otro lado, recuerdan que los productos de Comercio Justo garantizan los derechos laborales y humanos y respetan el medioambiente.
Pobreza, condiciones de trabajo abusivas, precios muy por debajo de costes que dejan salarios alejados del mínimo legal, explotación laboral infantil o degradación del medio ambiente son algunas de las problemáticas. Productos como café, té, azúcar, chocolate o ropa, que generan ingresos millonarios, tienen en común que su producción se desarrolla principalmente en países de América Latina, Asia o África. La desigualdad en el reparto de los beneficios a lo largo de toda la cadena de producción, es otro de los rasgos que comparten.
Café, cacao, té, azúcar y ropa
En el café, por ejemplo, un producto que genera unos 200.000 millones de dólares al año, en Uganda, los campesinos y las campesinas reciben el 6 % del precio final del producto, mientras que la empresa multinacional recibe el 50 %. En los dos principales países productores de cacao, Ghana y Costa de Marfil, las familias cacaocultoras reciben un 40 % menos del precio que deberían cobrar para tener una vida digna.
La explotación laboral infantil es otra de las problemáticas comunes a estos productos. En las plantaciones de cacao, solo en esos dos países, más de 1,5 de menores trabajan haciendo tareas peligrosas como manipular químicos o usar machetes.
Por otra parte, la recogida de caña de azúcar o del té esconde situaciones de semiesclavitud heredadas de los periodos coloniales. En el caso del corte de caña, un trabajo especialmente duro, mayoritariamente se sigue realizando de forma manual dado que la mano de obra resulta muy barata. Este trabajo se suele realizar a pleno sol, con altas temperaturas, pocos descansos y escasa agua potable. De hecho, en Centroamérica, 6 de cada 10 jornaleros de caña de azúcar han sufrido enfermedades debido al calor durante la jornada laboral.
En las plantaciones de té, la mayoría de sus trabajadores descienden de familias campesinas pobres que fueron reclutadas como esclavas hace más de 150 años. Su salario medio en las principales regiones productoras de India es de menos de la mitad del salario mínimo de un trabajador agrícola no cualificado.
La industria textil, además de ser contaminante, también consolida la pobreza: el 75 % de la mano de obra está en países asiáticos. En la actualidad, los salarios mínimos vigentes en ellos en este sector no son suficientes para cubrir las necesidades humanas básicas.
Productos de Comercio Justo
Los productos de Comercio Justo garantizan el respeto a los derechos laborales y humanos, salarios y condiciones dignas, prohíben la explotación infantil, apuestan por la igualdad de género y son producidos con técnicas respetuosas con la tierra y el entorno natural. El café, el cacao, el azúcar, el té o la ropa son los productos más significativos de este modelo comercial que nació en los años 60 y hoy está presente en más de 70 países.
En España en el último año las ventas de Comercio Justo no han dejado de crecer desde el año 2000 (el primero del que hay datos). En el último año alcanzaron una facturación de más de 144 millones de euros, en su mayoría gracias a los productos de alimentación. El textil en el último año aumentó su facturación en 1 millón de euros.
La celebración del Día Mundial del Comercio Justo está promovida en nuestro país por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) y cuenta con financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.
Fairtrade y el Centro de Comercio Internacional se asocian para ayudar a los agricultores
Fairtrade, la certificación de Comercio Justo más reconocida del mundo, y el Centro de Comercio Internacional (ITC), la agencia conjunta de la Organización Mundial del Comercio y las Naciones Unidas, han anunciado una asociación ampliada. Está destinada a ayudar a los agricultores y trabajadores agrícolas a diversificar y acceder a nuevos mercados, alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y luchar por la Agenda 2030,.
Los detalles de la asociación ampliada se describen en un Memorando de Entendimiento firmado por la directora ejecutiva global de Fairtrade, Sandra Uwera, el director ejecutivo de Fairtrade Max Havelaar Suiza, Renato Isella, y la directora ejecutiva del ITC, Pamela Coke-Hamilton.
Ambas organizaciones aceleran el trabajo para promover una mayor sostenibilidad entre los agricultores y trabajadores agrícolas de todo el mundo, permitiéndoles participar más en el comercio mundial. La colaboración verá un trabajo mejorado en una variedad de áreas, incluida la diversificación en la cooperativa para permitir que los agricultores enfrenten desafíos agroecológicos y socioeconómicos cada vez mayores. También, el empoderamiento de género, mujeres y jóvenes, y la adaptación al cambio climático y biodiversidad.
Otro objetivo es el fortalecimiento de las capacidades de gobernanza, gestión financiera y comercial de los grupos de agricultores. También, desarrollar la capacidad de las organizaciones de productores para establecer y mantener sus propios sistemas de monitoreo y respuesta sobre derechos humanos y debida diligencia ambiental, o DDDHM.
“Estoy encantado de ver que Fairtrade y el ITC vuelven a comprometerse y se basan en la fructífera asociación de larga duración de nuestras organizaciones. Juntos, podemos trabajar con un propósito renovado para permitir que los agricultores y trabajadores agrícolas de todo el mundo alcancen los ODS”, dijo Sandra Uwera, Directora General de Fairtrade Internacional, tras la firma del acuerdo en la sede del ITC en Ginebra, Suiza.
Fairtrade e ITC
Fairtrade y el ITC , en los últimos años, han trabajado en estrecha colaboración en el Mapa de Sostenibilidad del ITC, una herramienta única que compara los estándares voluntarios de sostenibilidad. Además, ambas organizaciones han colaborado a nivel programático en proyectos relacionados con las cadenas de valor del café y el cacao en Ghana , Etiopía y América Latina.
Ambas organizaciones esperan ampliar sus actuales esfuerzos de sostenibilidad en el cacao, el café y otras cadenas de valor, así como involucrar a socios comerciales y nuevas partes interesadas en alianzas público-privadas para abordar las prioridades de sostenibilidad de los productores. El acuerdo también ayudará a las organizaciones de agricultores a acceder a nuevos canales de distribución para sus productos, lo que les permitirá llegar a nuevos mercados y fortalecer sus finanzas.
Foto: Cooperativa de café COMSA en Marcala, Honduras. Sean Hawkey (Fairtrade.es)